El contrato de compraventa de empresas (de acciones o participaciones sociales de una sociedad) es un contrato bilateral, el cual, va a generar obligaciones recíprocas para las dos partes. La obligación más importante para el comprador es el pago del precio pactado, siendo conveniente en determinación al tamaño de la transacción que intervengan en esta operación asesores externos, así como realizar una auditoría y valoración económica del patrimonio. Todo esto resulta imprescindible, pues no existe precio marcado para las empresas, y las partes deben determinarlo a través de un proceso de negociación.
Cuando se negocia un contrato de compraventa hay que tener muy presente la cláusula de ajuste de precio, pues en torno a ésta gira cualquier negociación. El precio final de cualquier transacción dependerá del mecanismo de fijación de precio acordado entre las partes en el momento de la firma del contrato y se requiere que las partes hayan pactado unos estados financieros de referencia que servirán de punto de partida para calcular el ajuste.
Mecanismos de ajuste a través de las cuentas de cierre
Por un lado, se encuentran los mecanismos de ajuste a través de las cuentas de cierre. Se trata de pactar un precio provisional basado en la información disponible antes de la firma del contrato de compraventa para después ajustarlo al alza o a la baja según el resultado de las cuentas de cierre del siguiente ejercicio completo. Algunos de ellos son:
A). Deuda Neta: seguida del EBITDA, en el mercado español, el parámetro de ajuste más utilizado es la “Deuda Financiera Neta”. Forma parte de la deuda neta todo aquello que lleve aparejado carga financiera, como son las deudas bancarias o préstamos, entre otros. Se trata de la suma de todas las deudas financieras de una empresa, incluidas las que son a corto plazo, a excepción de la tesorería e inversiones a corto plazo. Para lograr una reducción del riesgo de manipulación, como podría ser un retraso en el pago de la deuda de proveedores, este parámetro se debe complementar con el ajuste del capital circulante o Working Capital, parámetro en el que figura la liquidez de una empresa a corto plazo.
B). Capex: se trata de la inversión en capital o inmovilizado fijo que realiza una compañía, ya sea para adquirir, mantener o mejorar su activo no corriente. Está diseñado para sociedades donde la inversión en las partidas que conforman el activo no corriente de una empresa es recurrente.
El Working Capital y el Capex se encuentran incorporados dentro de la Deuda Neta y tienen como finalidad disminuir el riesgo de manipulación. Así pues, una variación en el Working Capital o en el Capex, existiendo movimiento de caja, tiene como resultado la Deuda Neta.
C). Cláusula “EARN OUT”: Es una disposición contractual donde se acuerda que el vendedor recibirá, con independencia de recibir una cantidad fija, una cantidad variable en concepto de bonificación, cuya cuantía dependerá del beneficio de la empresa. Es utilizada cuando comprador y vendedor discrepan en relación con las expectativas de futuro de la sociedad y, en concreto, sobre el valor de ésta. El Earn-Out se aplica de diferentes formas, una de las más conocidas es la utilización de variables de medición, como puede ser el EBIT y el EBITDA. Esta cláusula dura desde la celebración del contrato hasta el día en el que se alcanzan los valores establecidos.
Mecanismo de «Locked Box«
Por otro lado, se encuentra el mecanismo de “Locked Box”,parámetro en el que se toma como indicativo una fecha de corte de los estados financieros de referencia previa al cierre de la operación. El periodo de Locked Box va desde la fecha de referencia a la fecha de cierre de la operación. Desde la fecha de locked box hasta la fecha de cierre el riesgo lo asume el comprador, y el vendedor se compromete a no realizar determinadas actuaciones (leakages), como pueden ser, por ejemplo, una distribución de dividendos, lo que supone una salida de caja a su favor dejando la sociedad en condiciones más desventajosas. Si esto sucede, el precio disminuirá y el vendedor deberá abonar al comprador las cantidades que hayan sido resultado de salidas de caja en beneficio de socios o accionistas.
Mecanismo de «Completion Accounts«
Existe también el mecanismo de “Completion Accounts”, en el que la intención de las partes es fijar un precio el día de la firma, pero con posibilidad por parte del comprador de revisar la situación económica y financiera de la sociedad para así poder ajustar el precio al alza o a la baja en caso de existir discrepancias una vez firmado el acuerdo de compraventa. Los estados financieros utilizados son los de la fecha de cierre de la operación y el riesgo se transmite en el momento del “closing”.